La detección en Chile de la polilla del brote en el año 1985, marcó el inicio del desarrollo de los programas de control de plagas forestales aplicando el “Manejo Integrado”, cuya base es el control biológico y el manejo silvícola. Fue así como Forestal Mininco inició su camino en el control de plagas a través de enemigos naturales hace más de tres décadas, años en los que la empresa ha adquirido conocimientos y experiencia para evitar que los árboles se enfermen.
Previo al año ´85 la masa forestal del país crecía sin daños económicos causados por plagas, las que llegan para quedarse puesto que pueden ser controladas pero no erradicadas, por las características del cultivo forestal y de los ciclos biológicos. En vista de ello, Forestal Mininco, en conjunto con otras empresas y el Estado, contactó a los centros de conocimiento más destacados del mundo, para comenzar con la producción y distribución de enemigos naturales específicos y exclusivos para cada plaga, estableciendo un control ecológico, sin riesgo para otras especies ni el medio ambiente.
Esto dejó en evidencia la necesidad de abordar el tema mediante un concepto de manejo integrado, en el que Forestal Mininco participa junto al SAG, INIA, CONAF y otras empresas forestales. Las plagas no reconocen fronteras ni propietarios, en virtud de ello la empresa es parte de mesas de trabajo nacionales en las que se acuerdan estrategias, evalúan resultados y se definen producciones de enemigos naturales. En este mismo contexto, Forestal Mininco jugó un rol importante dentro de lo que significó la creación de la Controladora de Plagas Forestales (CPF) en el año 1992, la que reúne a diferentes empresas del sector.
Luis De Ferrari, Subgerente de Gestión Certificada y Fitosanitaria de Forestal Mininco, ha sido parte de este camino. Con más de 20 años de experiencia en materia de plagas hoy concluye que “tenemos una masa forestal significativa, que va sufriendo la presión de los agentes dañinos. Hasta el momento hemos sido muy eficaces en conseguir el equilibrio con los agentes que han ido llegando, pero tenemos que prepararnos porque van a aumentar y probablemente vamos a tener que hacer un trabajo más tecnificado, en el sentido de aprender a usar herramientas que estamos utilizando poco como la biotecnología, para ver formas de hacer híbridos, buscar especies más resistentes o tolerantes al tema fitosanitario, entre otros”.
Asimismo, señaló que “vamos a tener que profundizar mucho en cuanto a conocimiento, puesto que va a tomar mayor peso el establecimiento de plantaciones según las características del sitio, porque muchas plagas atacan a árboles debilitados. Vamos a tener muchas amenazas para el pino y el eucalipto, lo que nos va a exigir contar con mayor conocimiento, ciencia, tecnología y silvicultura, saber qué plantar, dónde y cómo manejarlo, ya que hasta ahora se han enfrentado bien los problemas fitosanitarios, pero hay que tener presente la gran amenaza del cambio climático que se estima aumentará los niveles de stress de las plantaciones, debido a la disminución de la disponibilidad de agua en verano en el área de distribución de nuestras plantaciones”.
Cabe destacar que los principales aportes de Forestal Mininco a la protección fitosanitaria forestal han sido: fomentar y difundir el combate de plagas a través del “Manejo Integrado de plagas”, el conocimiento sobre la biología y el desarrollo de plagas y sus enemigos naturales, investigación sobre cómo producir enemigos naturales, producción y distribución de enemigos naturales, evaluación de niveles de parasitismo, innovación, participación activa en consejos y comités nacionales de protección fitosanitaria, organización de seminarios internacionales (Silvotecna), apoyo y asesoría a pequeños propietarios , entre otros.